Nuestro padre en los cielos,
(entrega total de sí, obedecer como un niño)
Santificado sea tu nombre,
(habla con profunda seriedad, respeto por el nombre de Dios)
Venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
(actuar según la voluntad de Dios, como ya es en el Cielo)
Danos hoy nuestro pan hoy.
(cuando haya logrado ser como le prometí a Dios, Dios extenderá sus bendiciones a mis actividades terrenales)
Perdónanos nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
(plena confianza en las leyes de Dios, perdonándonos retroactivamente a nosotros mismos y a los demás por nuestros fallos)
Y no nos dejes caer en tentación, sino líbranos del Mal.
(no nos dejes extraviar ni perdernos, sino líbranos de nuestras concupiscencias que causan pecado y muerte)
Porque tuyo es el reino, el poder y la gloria por los siglos de los siglos.
(reconocer la protección de Dios en su luz eterna)
AMEN